“Aquí ninguna autoridad ha venido, no han traído ninguna ayuda. Todo el apoyo es de gente particular que viene a dejar comida y otras cositas”, decía con rabia Carmen, una de las mujeres que junto a sus dos hijos se instaló en el boulevard que conecta los municipios de La Lima y San Pedro Sula, al norte de Honduras.

Esa carretera se convirtió en el albergue más grande en la zona norte del país luego del paso de Eta. Barrios y colonias enteros instalados en esa vía pública luego que el río Chamelecón desbordara inundando el ciento por ciento de la ciudad de La Lima.

A simple viste brotan las múltiples necesidades que tiene la ciudadanía, viven en esa carretera bajo sol y agua, sin acceso a agua, servicios sanitarios, carpas o colchones para dormir. En entrevistas realizadas por Radio Progreso la gente pide a sus autoridades locales y nacionales apoyo en este momento de crisis humanitaria, no abandonarlos más ahora que se anuncia el paso del fenómeno Iota.

En esta selección de imágenes mostramos la realidad de las madres, hijas, abuelas, vecinas, todas mujeres damnificadas del municipio de La Lima, Cortés. A pesar de la precaria realidad sigue en pie reclamando que las autoridades sean responsables con estas comunidades.

Luego de permanecer una semana en el boulevard principal de La Lima, Cortés, la falta de agua para el aseo y consumo, se convierten en uno de los principales problemas que las damnificadas enfrentan.

Las mujeres representan el 51.7% de la población total de Honduras, lo que en términos absolutos representan 4, 735,920 personas, de las cuales, el 56.8% se concentran en el área urbana y el 43.2% en la zona rural, según Encuesta Permanente de Hogares de Propósitos Múltiples de 2019.

El paso del fenómeno Eta provocó inundaciones catastróficas que han devastado la vida de más de 1,2 millones de niños, niñas y adolescentes en Centroamérica, según estimaciones de UNICEF.

Según el Foro Social para la Deuda Externa de Honduras, Fosdeh, las pérdidas por el paso de Eta podrían llegar a los 12 mil millones de lempiras. Sacar a Honduras de la crisis severa en materia económica pasa por elaborar y poner en práctica un Plan de Reconstrucción Nacional donde participen todos los sectores.

Copeco reporta 425 albergues habilitados en todo el territorio nacional, en los cuales hay 42 mil 746 personas.

El recuento de los cuerpos de socorro contabilizan un total de 92 mil 223 rescate de personas. Las viviendas afectadas se contabilizan en 22 mil 154, la mayoría en el Valle de Sula.

En entrevista con Radio Progreso, Alejandro Kaffati investigar y economista del Fosdeh, dijo que el gobierno de forma inmediata debe empezar con la ejecución de un plan de reconstrucción nacional.